Según datos del Observatorio de Nutrición Infantil, en lo corrido del 2022, 253 niños y niñas menores de cinco años han muerto por desnutrición.
Artículo de Portafolio.
Uno de los principales problemas en el país es la inseguridad alimentaria que se vive y que afecta, de forma contundente, a los niños y niñas de Colombia. Una de estas comunidades impactadas son los indígenas wayuu en La Guajira.
Según la Asociación de Bancos de Alimentos de Colombia (Abaco) un niño que haga parte de esta comunidad tiene seis veces más probabilidades de morir por desnutrición que cualquier niño de Colombia.
¿La razón? El 96% de los niños wayuu no tienen acceso a agua potable. Según datos del Observatorio de Nutrición Infantil, 65 niños han muerto en 2022 en La Guajira por desnutrición.
La cifra podría ser mayor, ya que hay muertes que no se registran de forma oficial y ocurren a diario en la profundidad de las rancherías de los wayuu, apuntan expertos de Abaco.
El panorama a nivel nacional tampoco es alentador. En 2022, Colombia alcanzará la cifra más alta de muertes por desnutrición infantil de los últimos cinco años. Según el Programa Mundial de Alimentos, actualmente, hay 21 millones de personas que tienen dificultades para acceder a alimentos en Colombia.
En sintesis, cada día muere un niño en el país a causa del hambre. Desde el Banco de Alimentos, a través de iniciativas como el “Banco de Hilos” y “Los paisajes del hambre 2: La Guajira”, sumar voluntades y brindar soluciones eficaces para enfrentar el flagelo del hambre en Colombia.